Treinta experimentos de asociación libre (1 a 10)

 

Esto es muy personal. Casi nunca hacemos experimentos de asociación libre. Acá va uno que quizás pueda ser el tuyo. Si no te interesa leerlo (no te culpo por eso…) puedes tomar las palabras y hacer tu propio experimento. Toma tiempo, pero es enriquecedor. A veces la redacción puede ser extraña y salirte ideas retorcidas (también unas sublimes y elevadas), pero no pierdas el chance de ver qué te sale de adentro. 

1. Fluidez

Liso, suave, que corre fácil. Nada lo detiene. La fluidez es tranquila, sonriente, no tiene ansiedad ni quiere agradarle a nadie. Fluidez es en el habla cuando las palabras salen de adentro sin plan, sin la presión de persuadir o hacer que yo piense de otra forma o sin la necesidad de hacer que otro cambie de parecer.

Fluidez es lo que le falta al mundo. Estamos llenos de atranques innecesarios. Atrancamos todo y no dejamos que fluya nada. Atrancamos el dinero, la diversión, el aprender, las decisiones… todo. Vivimos atrancados. Por eso nos enfermamos tan fácil, porque somos fluido y a su vez todo fluye a través de nosotros.

Respiramos y el aire entra y sale, comemos y la comida entra y sale, escuchamos y la información entra y sale. Nunca somos los mismos porque siempre estamos en contacto con el mundo, ni el mundo es el mismo cuando entra en contacto con nosotros. Viviendo no dejamos el mundo igual. Todo siempre está fluyendo, todo es impermanencia, nada nunca está igual.

 

2. Exuberancia

Es algo abundante, algo grande que provoca. Es un bosque muy verde, con muchos árboles y mucha agua. Es un bosque fresco con mucha sombra, es un lugar del que no quieres salir cuando hace calor y el Sol aplasta.

Son unos senos grandes, unos senos que provoca mirar y tocar. Es una mujer de piernas largas y fuertes que camina con confianza. Es una mujer que camina segura y a la que no le importa nada que la distraiga.

Es la montaña que veo desde el balcón de mi apartamento. Es la selva húmeda tropical que la cubre. Exuberancia es la luz solar que la ilumina por las mañanas. Exuberancia es la pendiente que tiene cuando estás a sus pies y logras comprender que es más grande y más imponente de le que parece desde abajo.

Exuberante es una conferencia que me deja perplejo, es ese tema en el que no había pensado y que me deja lleno de preguntas y ganas de seguir leyendo. Es esa conversación que no quiero que termine cuando se acabe el vino. Toda es abundancia es exuberante.

 

3. Cuchicheo

Es una verdadera molestia. Es lo que dice y no paran de decir. Es una conspiración de bajo presupuesto, sin consecuencias. Cuchicheo es de señoras. Yo no soy una señora y a veces cuchicheo.

Cuchicheo es lo que se oye en el estacionamiento de vehículos a media noche cuando llega un auto y la gente se despide o dice cualquier cosa. Todo es cuchicheo, un ruidito permanente, un parloteo que no para.

La gente habla mucho, no dejan de hablar, hablan y hablan para romper la incomodidad del silencio; todo eso es cuchicheo. Es un ruido constante para vencer el miedo.

Cuchicheo es esa vocecita mental con la que nos repetimos todo lo que pensamos a toda hora, lo que rumiamos, las ideas recurrentes, los miedos, las inseguridades, las prevenciones, las confianzas, las seguridades, las vanidades y los éxitos. Todo eso es cuchicheo.

Cuchicheo es cuando el pasado, el presente y el futuro, lo que se puede y no se puede, lo que quiero y lo que extraño, conversan al mismo tiempo en mi cabeza y no logro entenderles. Cuchicheo es todo ese ruido que producen. Me cansa.

 

4. Búsqueda

Búsqueda es lo que hacemos todos. Creo que sin excepción todos estamos buscando algo. Hay quienes buscan afuera y hay quienes adentro. Unos buscan solo dinero y otros buscamos otras cosas.

Búsqueda es lo que llevo haciendo hace años, desde que decidí irme de mi casa en el 2006. Búsqueda es este blog y lo que todavía no encuentro. La búsqueda es una expectativa y las expectativas siempre encierran un factor de decepción porque parten de esperar algo. Busco, encuentro o me decepciono.

Hay que aprender a no esperar nada, hay que aprender a no andar buscando tanto porque así me enfoco solo en el resultado y no lo suelto. La búsqueda en sí es interesante, buscar y buscar, no siempre saber qué me voy a encontrar. Ya he buscado muchas cosas que cuando las encuentro no sé qué hacer con ellas y me dejan de importar; eso me ha pasado seguido. Por eso sigo buscando nada más y cada vez espero menos. Ya no me importa encontrar nada, solo buscar y tomar en las manos lo que me llame la atención; con eso es suficiente.

En serio que es divertido solo buscar, eso agudiza los sentidos y me vuelve más observador. Nunca sé cuándo me encontraré un dije de oro en medio de la basura.

 

5. Remanente

Es la energía que queda después del cansancio. Esa energía me ayuda ver cualquier cosa en Netflix después de que ya está tarde en la noche. Remanente es la energía que me queda cuando voy de regreso a casa cuando salgo a rodar en bicicleta; duele el sentadero, duelen un poco las piernas, hace calor y tengo sed, pero todavía tengo cómo llegar a casa; es importante llegar rápido y llegar bien.

Remanente es el dinero que queda después de pagar las cuentas. Es ese dinero que no siempre sé que hacer con él pero que lo tomo como ahorro. Es difícil ahorrar cuando tienes deudas, pero siempre hay que ahorrar y asegurarse de que ese dinero sea fácil de tomar cuando se necesite. De nada sirve un ahorro con el que no puedes hacer nada en caso de emergencia; un ahorro útil es un remanente.

Remanente es el poco de arroz que queda en el tarro al final del mes, poco antes de tener que volver al mercado a comprar otra bolsa. Es un remanente de comida; es valioso porque a mucha gente le hace falta; pienso mucho en eso cuando intento despreciar el arroz porque me parece una comida básica que engorda y que siempre hay que mezclarla con algo más para sacarle gusto. Hay mucha gente en el mundo que estaría más que feliz de poder comerse ese “remanente de arroz”.

Entonces descubro que hay que dar gracias por los remanentes que tengo de comida y sobre todo de arroz. Los remanentes son siempre un recordatorio de la felicidad que nos queda.

 

6. Estrellar

Es un huevo cuando cae en el sartén. Estrellar es un huevo estrellado. Estrellar es lo que le pasará finalmente a todos los que manejan una motocicleta; no puedo evitar pensar en eso; he presenciado muchos accidentes en motocicleta desde que era pequeño. Solo pienso en gente estrellada cuando van en motocicleta. Deseo también que muchos motociclistas se estrellen cuando veo que hacen imprudencias en la vía, pero no hay que desear el mal.

Estrellarse es lo que le pasa a mucha gente que ingresa a la compañía donde trabajo. A mí me pasó y ahora lo entiendo y por eso les ayudo también a ellos cuando pasa el tiempo y conversamos y me cuentan cómo se sienten; es una compañía con una cultura contra la que te estrellas, no te adaptas a ella ni la asimilas, sino que primero te estrellas contra una pared de hormigón durísima que no ves sino hasta que te golpeas con ella. Te caes al piso, encuentras dos o tres rufianes que te patean en el piso mientras se ríen, luego te miras las contusiones que tienes, haces lo posible por ponerte de pie y te haces a la idea de pasar por encima del muro de hormigón. Así es que te estrellas.

Estrellar es llenar el techo de estrellas que brillan en la noche y hacen que el cielo del cuarto a oscuras sean un espectáculo. Ahora que lo pienso, “estrellar” puede ser arañar el cielo o el infierno. Algo o alguien que se estrella contra mi vida, eso es estrellar. Me gustan las noches estrelladas a veces, varias de ellas las he disfrutado.

 

7. Relajación

Es estar solo en silencio. Es estar en el campo sin gente a los lados, sin nadie que ponga música ni que te hable. Es un buen libro a la mano que me tiene atrapado. Relajación es la mente enfocada, tranquila, sin inquietudes. Casi nunca logro ese estado. Es muy difícil de lograr con todo lo que tengo para pensar y para hacer; las cuentas no se pagan solas, esta idea viene mucho a la cabeza y es como un taladro. Esta idea no deja hacer nada diferente, produce mucho miedo y desconfianza a veces.

Relajación es sentarse en el cojín a meditar, pero no siempre las rodillas y los muslos se relajan en la posición de loto. Es complicado y a veces duele. Todo va bien hasta cuando viene el calambre, es ahí cuando desparece la relajación.

Relajación es la vida sin deudas. No hablo solo de deudas de dinero, es cuando no hay nada pendiente y esto casi nunca ocurre; siempre hay algo pendiente, sea en el trabajo, en la casa o con la familia y los amigos, siempre hay algo pendiente, nada se cierra y no hay relajación en ese sentido.

La relajación es como algo y no es nada, es una idea, un estado de la mente y del alma. La relajación es complicada en estos días, hace muchos años la extraño, no sé si de verdad existe.

 

8. Lazo de cariño

Amigos, es la primera idea. Es una idea de cercanía incondicional que soporta el paso del tiempo. Son buenas personas, no nos vemos seguido, pero sé que cuento con ellos y ellos (ellas) saben que cuentan conmigo.

También hay cosas con las que tengo lazos de cariño. Hay cosas que quiero como si tuvieran vida y personalidad propia. Por ejemplo, mis libros más importantes; me une a ellos un importante lazo de cariño y hasta de admiración. Los cuido por eso y les tengo cariño. Es una sensación que se confunde entre la veneración y el cariño, es como un culto raro.

También le tengo cariño a mis bicicletas y a mi automóvil. Le tengo cariño al reloj que me dio Henry y al que me dio mi hermana; ambos son especiales y les tengo cariño. Le tengo cariño a mis CD’s, aunque hace tiempo que gracias al MP3, Youtube y Spotify casi no hay necesidad de ponerlos; de vez en cuando los uso para que no se dañen guardados; algunos de ellos “me vieron crecer”, los tengo hace casi veintitrés años. Recuerdo todo el esfuerzo que tuve que hacer para comprarlos porque en esa época eran muy costosos y a veces hasta escasos.

Le tengo cariño a varios recuerdos que guardo para mí, por todo lo que significan en silencio.

 

9. Sacrificio

Me suena a tontería. No sabemos qué es un sacrificio y “hacemos” sacrificar correctamente. Me suena a resignación insensata. Sacrificio es la bobada de alguien, aunque la palabra sacrificio viene de sacro que también significa “sagrado”.

Es algo que no estoy dispuesto hacer muchas veces. Me viene funcionando “no sacrificar”. Sacrifico lo que valga la pena sacrificar y nada más; a veces es una distinción difícil de hacer, pero con calma y deliberación se puede determinar razonablemente bien cuándo sacrificar y cuándo no.

Hace tiempo dejé de hacer cosas por sacrificar. Ya no lo haré más. Hay gente sacrificada, sobre todo muchas mujeres que conozco y que se sienten muy especiales y que creen que merecen más cosas de la vida por los sacrificios que han hecho. No veo por qué, pero se sienten representantes de una moral superior por sus sacrificios, como si a alguien aparte de ellas mismas le importara.

El gobierno crea más burocracia para atender a las sufridas y sacrificadas mujeres. No todas son así por fortuna, hay una élite de mujeres independientes e iguales que no se tragaron el cuento; no son más ni son menos, son iguales, una parte del todo y el complemento necesario, punto. Es suficiente con eso, no se tienen que “sacrificar” ni hacer las mártires sufridas. Quieren que caminemos con ellas y quieren caminar con nosotros; es delicioso hacer cosas con ellas.

Siento un profundo desprecio por los sacrificios y por la idea de sacrificarse… ahora que lo pienso. Me gusta la gente que antepone el objetivo con el que se comprometieron sobre sí mismos o sobre su bienestar actual; no sacrifican nada, simplemente hacen lo que dijeron que iban hacer.

 

10. Crecimiento

Es lo que brota, lo que germinó y salió de la tierra. Es cuando siembro un árbol y pasa el tiempo… llego a verlo de nuevo y es otro árbol distinto al que dejé. Tiene retoños y está creciendo.

Me voy de viaje una semana y llego y encuentro a mi hijo diferente. Son pocos días, pero él cambia demasiado rápido; habla mejor, es más consciente de sí mismo. Hay crecimiento en él. Este hombrecito es puro crecimiento y me encanta verlo crecer.

Crecimiento es lo que no entiendo de la economía cuando dicen que creció o no creció. ¿Cómo crece? Parece que siempre se agotara en sí misma y no diera a todos lo que se merecen por lo que hacen.

El crecimiento es como el hermano rebelde del equilibrio. Ambos viven luchando entre sí, aunque afortunadamente el uno es más sabio que el otro y termina controlándolo todo, aunque a veces se le escapan las pequeñeces humanas. Siento cierta resistencia escondida frente a la idea del crecimiento, siento que hace que al final todo se desborde y se pierda de su concepción original. Es como una obsesión.

 

🙂

 

2 comentarios en “Treinta experimentos de asociación libre (1 a 10)

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