Salir adelante, aventurarse y triunfar

Este arcano marca la llegada a un lugar de triunfo. Si estás aquí, has superado la adversidad o has conquistado los recursos necesarios para superarla. Cada prueba es circunstancial y en todo momento nos está mostrando de qué estamos hechos.

En un inicio emprendiste el viaje del héroe y luego de escuchar el llamado a la aventura, superar las pruebas y remover los obstáculos que había en el camino, ahora llegas convertido en otra persona, una más sabia, atenta, humilde y cordial.  No obstante, también sabes que este es un triunfo pasajero, que hasta ahora empieza un nuevo camino, pero que con lo andado has adquirido lo necesario para afrontar lo que sea que venga.

Este triunfo es uno interior, no se trata de conseguir nada, de llenar tu cuenta bancaria, comprarte un auto o ese viaje soñado. En este punto has conquistado los dones intuitivos del cerebro femenino y las capacidades racionales del cerebro masculino. En ti palpitan los arcanos del mundo celeste, del reino de los dioses.

Para los griegos, un héroe era el híbrido que se producía entre un humano y un dios. Por eso este arcano es uno de transición: porque nos permite descender de los cielos y poner los pies en la tierra, encaminarnos para encontrar el equilibrio.

Puede ser que los demás te aplaudan, te alaben, pero por dentro sabes que esta es solo una cuestión pasajera, que es una pequeña victoria y un paso en el camino hacia la conquista interior. Este arquetipo representa la personalidad que se aleja de patrones rígidos de control y que fluye consciente y establemente, por eso se simboliza por el carro que está en movimiento tirado por dos polaridades y un ser integrado en el centro que guía ese carro.

Así como es una simbología de triunfo, también lo es de partida, toma de oportunidades y avance hacia territorios nuevos. Cuándo has conquistado algo en ti ¿acaso no sientes que estás en un lugar nuevo?, ¿no te has experimentado como si fueses una persona nueva?, ¿has empezado a ver tu mundo más expandido? Posiblemente te experimentas impulsada por energías renovadas. Estas conquistas se manifiestan en el exterior, en el mundo material, porque por ley de correspondencia, como es adentro es afuera.

Posiblemente te ha tocado luchar para conseguir lo que buscabas, quizás no ha sido un proceso fácil ni te han regalado nada. Este arquetipo de habla de las conquistas personales a través del esfuerzo, la dedicación y la superación de obstáculos en su mayoría internos. Cada vez que has superado un miedo o una inseguridad, ha sido la activación de este arquetipo la que te ha servido porque para entrar en el reino del equilibrio te debes gobernar a ti mismo (a).

Este arcano también habla de superar los obstáculos que te impone el mundo exterior y de los desafíos cuando abandonamos el mundo protector de la familia, los amigos y la sociedad donde nacimos. ¿Alguna vez has tenido que migrar hacia otra ciudad o país? ¿Te has tenido que enfrentar a una cultura nueva, un idioma diferente e incluso gente que no te valora ni te respeta por tu origen? Cada que superas alguna de estas circunstancias, te subes al Carro y avanzas, pero cuando desconoces el terreno nuevo es recomendable bajarse y recorrerlo a pie para experimentarlo, saborearlo y comprenderlo… luego el conocimiento nuevo te da una idea y vuelves y te subes al Carro.

El Carro no tiene sombras, más allá del uso que tú le des. Es un instrumento y un vehículo, porque las sombras están en ti cuando lo conduces.

🙂