Diferenciar y balancear, lo urgente y lo importante

En un pequeño pueblo rodeado de montañas, vivía un sabio llamado Shoji. Los habitantes del pueblo recurrían a él en busca de consejo, pues era conocido por resolver los dilemas más complejos con sencillez.

Un día, un joven llegó corriendo hasta la casa de Shoji. Estaba agitado y su rostro reflejaba ansiedad.
—¡Maestro! —dijo—. No sé cómo organizar mi vida. Siempre estoy apagando incendios, pero nunca tengo tiempo para construir lo que realmente deseo. ¿Qué debo hacer?

Shoji sonrió y le pidió que lo acompañara al bosque. Allí, se detuvieron frente a un pozo seco.
—Mira este pozo —dijo Shoji—. Imagínate que el pueblo necesita agua para sobrevivir. Si un incendio amenaza el bosque, ¿qué harías primero: apagar el incendio o llenar el pozo?

El joven pensó por un momento y respondió:
—Apagaría el incendio, maestro. Si no lo hago, el fuego destruirá todo, incluso el pozo.

Shoji asintió.
—Correcto. Pero, ¿qué pasaría si siempre estás ocupado apagando incendios y nunca llenas el pozo?

El joven frunció el ceño.
—Entonces, cuando llegue la sequía, no tendremos agua y todo estará perdido.

Shoji lo miró con calma.
—Exactamente. Apagar incendios es lo urgente, pero llenar el pozo es lo importante. Si solo te ocupas de lo urgente, llegará un día en que lo importante te faltará, y con ello, tu capacidad de enfrentar cualquier crisis. Aprende a priorizar. Dedica tiempo cada día a llenar tu pozo, incluso mientras enfrentas incendios.

El joven inclinó la cabeza, comprendiendo.
—Entonces, maestro, ¿cómo decido cuándo llenar el pozo y cuándo apagar incendios?

Shoji señaló el horizonte donde el sol comenzaba a salir.
—Mira la luz. Siempre hay tiempo antes de que el fuego crezca. Organiza tus días para cuidar lo importante antes de que lo urgente te consuma. Un día sin agua es manejable, pero un pozo vacío puede costarte la vida.

Desde ese día, el joven aprendió a equilibrar sus esfuerzos entre lo urgente y lo importante, y encontró la paz en el orden que había buscado.

Crédito a su autor (a), llegó a través de un mensaje

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