Tal vez hayas notado una cierta tendencia  que lentamente crece en los interminables posts de Facebook. Pareciera que ahora se ha convertido en la nueva droga el hecho de pedir, dar y recibir likes (Me gusta) por cualquier cosa ¿Estamos tan necesitados de atención?

Los memes que “nos definen”

Ahora resulta que si no das “Me Gusta” entonces “no eres” lo que dices ser. Este estilo de meme es el más común y algunos suenan inclusive como si fueran una causa, como que eres “menos malo” o eres una “mejor persona” solo por dar like.

 

 

 

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Los memes que nos obligan

Aunque todos en el fondo terminan siendo la cara de la misma moneda, hay quienes sucumben al sentido de obligación o a la culpa por dejar de dar “Me gusta”. Eso es íntimo, es personal, nadie se dará cuenta si pasas de largo por la publicación sin hacer nada, pero basta con ver las escandalosas cifras de likes que reciben. Es igualmente encantador ir a conferencias o leer temas de mercadeo que se asombran de esto y les parece el gran asunto de la década: cientos de miles de likes por cualquier banalidad.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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Me encantará Facebook el día en que…

Agreguen junto al botón “Me gusta” la opción “Guácala”,  “Apesta” o “Detestable”. Puede ser que se trate de la noticia de un terremoto, un avión que se estrella o un perro quemado vivo, y aparecerá el meme diciendo: “Sé que no le darás like porque eres un insensible”. En todo caso seguiremos en el juego de «juzgar» ¿Y par qué hacerlo?

 

 

 

 

 

Al final pareciera que se ha convertido de buen augurio la “moneda” de los likes, como una especie de droga o sucedáneo que nos aliviana (el ego) o un buen pasatiempo cuando no tienes nada mejor que hacer y simplemente abres Facebook y empiezas a darle «Me Gusta» a tonterías, mientras la red social sigue atrapándonos, hipnotizándonos y vendiéndonos más pendejadas.

 

¿Volverás a dar ese «Me gusta»?